Impiden Agricultores Extracción de Agua en “La Boquilla”
Por: Oscar Javier Amaya Ibarra.
Analista Político
Hace varios años que los Chihuahuenses venimos siendo testigos de una problemática que ningún gobierno nos comunica de manera certera, han pasado algunos sexenios y todo indica que ninguno de esos gobiernos ha sabido resolver el problema. Hace unos días Patricio Martínez hizo unas declaraciones ante El Heraldo de Chihuahua y creo, que como nadie lo había hecho anteriormente, nos explicó con manzanitas, la situación real del llamado convenio entre México y los Estados Unidos, respecto del agua.
Según el exgobernador Patricio Martínez, el agua que Estados Unidos nos entrega del rio Colorado allá por Baja California, son mil 850 millones de metros cúbicos y queda establecido en ese convenio que nosotros debemos entregarle al rio Bravo 432 millones de metros cúbicos, de los cuales una parte se debe entregar de las presas de Chihuahua. Lo anterior demuestra que, según el convenio de 1944, la entrega de agua a Los Estados Unidos, no es una deuda, es la forma en que los dos Países acordaron repartirse el agua de los ríos Colorado y Bravo por los cuales cruza la línea divisoria entre México y Estados Unidos.
La situación que prevalece en el centro sur del estado, por la entrega de agua a Los Estados Unidos de Norteamérica, ha llegado ya a extremos peligrosos. Los agricultores de la zona han estado muy activos en defensa del vital líquido. Su poder de convocatoria es tan fuerte que el martes 7 del presente, se reunieron en las inmediaciones de la presa La Boquilla, miles de pobladores de aquella región que apoyan el movimiento.
Según los videos que han estado rolando por las redes sociales, se observa la gran cantidad de gente que acudió en apoyo a la causa de los agricultores, sin embargo, no podemos afirmar que todos sean parte del movimiento en defensa del agua. Pues no sería una novedad que dentro de ese movimiento haya fuerzas de choque que estarían aprovechándose de la situación. Creo que lo más sano es que las autoridades investiguen y descarten la posible intromisión de gente preparada para agitar, aún más, un problema que ha escalado en los últimos meses, con mayor razón ahora que se ha registrado la muerte de uno de los miembros del contingente de los agricultores, los que solo exigen se les respete el derecho a tener agua suficiente para su ciclo agrícola.
Los más de quinientos elementos de las fuerzas federales (Guardia Nacional), que se encontraban resguardando la presa, aunque intentaron repelar la fuerza de los inconformes, dicen, utilizando gases lacrimógenos y balas de goma, no pudieron contener a los miles de pobladores que estaban decididos a defender con todo, el insumo para la producción agrícola que representa para ellos el patrimonio familiar. Se supone que, por órdenes superiores, los Federales optaron por abandonar el lugar. Los videos dan cuenta de unos Guardias Nacionales que se retiran, bastante cansados, frustrados, enojados y humillados por la población.
Es una lástima y una gran pérdida de recursos, el enviar semejante contingente de miembros de la Guardia Nacional a repeler a unos agricultores que se unen ante un problema que hace tiempo debió haberse resuelto de manera política. Los elementos que vienen a perder el tiempo y solo a hacer el ridículo deberían aprovecharse en darle al pueblo la seguridad que hace muchos años nos arrebataron igualmente por decisiones políticas equivocadas, que hoy por hoy, todavía nos tiene sumidos en una profunda inseguridad que no se le ven visos de poder controlar. Las Autoridades tanto de la Federación como del Estado, optan por echarse la culpa unos a otros, pensando quizás, en la utilidad político electoral que un movimiento de esta naturaleza les representa, sobre todo cuando estamos iniciando una etapa más de elecciones. Unos culpando a los “conservadores” que son todos aquellos que no simpatizan con su causa y, por lo tanto, según ellos, están en contra del actual régimen y que, en el caso de Delicias, afirman, solo buscan hacer grilla para lograr fines electoreros. El otro, siempre belicoso y aprovechando su único capital político, esa facilidad de tribuno que lo distingue, pero que se olvida de que fue votado para dar soluciones a los problemas del estado, de esto último hay suficientes evidencias, por la relación con poco oficio político, que guarda con los Alcaldes de Juárez y de la capital.