¿Y la Oposición?

Por: José Eduardo Limón Camacho.

Analista Político

Hay quienes dicen que en México no hay oposición, que los partidos políticos se encuentran perdidos en una lucha interna para obtener en favor de su grupo la parte más grande del cachito del pastel y en otra con la ciudadanía para recuperar la suficiente credibilidad que los lleve a obtener algunos curules en el 2021.

Hay quienes dicen que hoy por hoy en México, no existe ningún personaje que le haga frente a López y su pandilla, pues se generaliza diciendo que todos pertenecen a una clase de políticos que se han manchado tantas veces las manos que cuando levantan el dedo para señalar la tragedia de gobierno, otros tantos más aparecen para recordarles el lodazal en que ellos mismos están parados.

Qué decir de los periódicos, noticieros, reporteros, activistas sociales de los cuales se opina que su voz suena en un sentido o del otro, al compás del conteo de billetes; la misma suerte corren los empresarios, a quienes con particularidad se les atribuye su descontento por una pérdida individual de riqueza y no por el aumento de la pobreza.

Esas voces podrán tener razón, en cuanto a que la oposición, así como la esperan ver, se encuentra desquebrajada y envilecida; ya sea por la corrupción tan latente de la que son parte o porque en términos reales, cambió el partido en el poder, pero los vividores siguen siendo los mismos, de ahí que la pregunta subsista ¿y la oposición?

Pero a estas alturas del partido, ya debemos buscar respuestas en otros lados, esperar algo distinto de quienes han hecho siempre lo mismo, es un pecado de ingenuidad que nos ha costado bastante caro. ¿A dónde volteamos entonces?

Volteemos la mirada a esas asociaciones civiles o movimientos sociales, que silenciosamente van tomando fuerza en la opinión pública y no porque la busquen, sino porque las políticas del señor del banquillo y de su equipo los atacan directamente.

Así tenemos a los agricultores de nuestro Estado, en la lucha por el agua enfrentándose a la sinrazón del gobierno federal, que por más explicaciones de lo absurdo que es abrir las presas de la Boquilla y Las Vírgenes, la necedad impera y la respuesta se resuelve con más elementos de la Guardia Nacional peleando con agricultores y no con el crimen organizado.

En otro ámbito, se encuentran el Frente Nacional por la Familia y el Consejo Mexicano de la Familia, por mencionar los más destacados, encausando una defensa por la vida y la familia, que logra de una manera clara y contundente reunir bajo una misma bandera a más de la mitad de los mexicanos.

También están los familiares de las víctimas de violencia, que enfrentan no solo la huella del ultraje sino también el olvido del gobierno, violencia que ha escalado y ha generado una reacción en la que la justicia no espera a las autoridades.

Tenemos a FRENA, y su generalizada aceptación ciudadana en contra del gobierno de Andrés Manuel; movimiento que, aunque han tratado de desprestigiarlo con la supuesta participación exclusiva de los ricos, ha demostrado unir a pobres, clase medieros y ricos así lo hemos visto en las caravanas vehiculares organizadas por todo el país en el que concurren desde los más fregados, hasta los más lujosos vehículos.

Y también decirlo con justicia: periodistas, empresarios, políticos y militares que con las manos limpias y el mismo hartazgo que miles de mexicanos, trabajan arduamente en la construcción de un país al que se le ha hecho mucho daño y que con el espíritu propio de la profesión realizan las tareas más heroicas al enfrentarse a un sistema corrupto y corruptor.

¿Y la oposición? ¡La oposición está ahí! Al pie del cañón organizándose y lista para darle a MORENA y a MALO, una sorpresa en el 2021; la ciudanía saldrá a buscar a los personajes más valientes para enfrentar al tirano, a los más sagaces para corregir el rumbo, a los más honestos para hacer justicia y a los protectores de la vida para garantizar la vida. Y sí algo tiene de bueno este gobierno, es que nos dio un ideal que no se compra con dinero, sino con el esfuerzo y la lucha constante, Andrés Manuel ataca y destruye lo que más amamos, pero no se dio cuenta que, a México lo llevamos en la sangre y que si osare un extraño enemigo profanar con su planta tu suelo piensa ¡oh patria querida! que el cielo un soldado en cada hijo te dio.

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