Elecciones internas en el PAN
Por: Oscar J. Amaya Ibarra.
Analista
En las elecciones del domingo pasado en Chihuahua, donde los panistas internamente fueron a las urnas para votar por quien los debe representar como candidato a la gubernatura del estado, todo indica que se llevaron a cabo en buena lid y, donde Maru Campos, se alzó con una victoria bastante holgada ante su oponente, Gustavo Madero.
La derrota, fue más estrepitosa para Javier Corral toda vez que, no solo estaba apoyando a Madero, sino que también mantiene pleito casado con Maru desde hace un tiempo, noticia que no es noticia, puesto que la conocemos desde hace tiempo, en Chihuahua y también a nivel nacional. Por lo pronto, desde hace un año y medio, aproximadamente, no la recibe en palacio ni toma acuerdos con ella, datos que ellos mismos se han encargado de divulgar.
Gustavo Madero, de inmediato reconoció que las votaciones no le favorecieron y eso, de entrada, habla muy bien de él, pero, además de reconocer públicamente su derrota, también comentó que sigue en la brega política, lo que podría tomarse como un regreso a su curul en el Senado de la República o, quizás, quiso decir que seguirá con licencia y pendiente, para entrar al relevo en el remoto, pero no imposible caso, de que Maru desista por “motivos de salud”.
Es bien sabido, porque se ventila en los medios desde principios del gobierno de Javier Corral, que el gobierno de Chihuahua tiene abierto expediente (s) en contra de Maru Campos, por supuestas irregularidades cometidas en la administración de Cesar Duarte. Pero la acusación, hasta ahora, ha sido solo mediática. En las últimas semanas dichas acusaciones han tomado mayor relevancia por la cercanía a las elecciones de junio próximo. No sabemos bien a bien si existen las pruebas en contra de Maru, pero es un hecho que, sí existen, en los próximos días podrían revelarse o bien, de plano dejar que Maru continúe con su campaña.
De judicializar el caso y llegar hasta provocar que Maru Campos, abandone la candidatura del Pan, podría ser Madero el candidato y, quizás, esa sea la razón por la cual tan fácilmente aceptaron la derrota. De ser así y de que Madero, tome la estafeta como candidato, sus posibilidades de derrotar al candidato de Morena se ven escasas, no obstante que, a Juan Carlos Loera, no se le nota el carisma suficiente para lograr pegar en el ánimo del electorado, pero cuenta con el apoyo de la cuarta transformación y personalmente del apoyo moral del mismo presidente.
Es por eso y porque, según las redes sociales, Madero no tiene ni de lejos, la gente que tiene la Maru, resulta muy difícil que consiga la votación necesaria para ganarle a Morena… al tiempo.
ojai