EFE – Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), afirmo este martes que la compra de la refinería Deer Park en Houston, Texas anunciada ayer lunes por el gobierno de México, mostró que la construcción de Dos Bocas es económicamente injustificable, debido a que el costo destinado para esta obra es demasiado elevado.
Lomelín explicó que, desde el punto de vista económico, un gasto público se justifica mediante la creación de ingresos que al corto plazo afecta al consumo y a largo tendrá una estructura de capital que dará más bienes y servicios.
Sin embargo, el gasto de la refinería en Tabasco impulsada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a juicio del líder empresarial, no está justificado ya que la compra de acciones de Deer Park costó tan sólo 600 millones de dólares.
Mientras que por la refinería de Dos Bocas se pagarán alrededor de 8 mil 900 millones de dólares. Además, ambas refinerías procesarán 340 mil barriles diarios.
“Dos Bocas debió haber costado mil 200 millones de dólares. Si en realidad le estoy gastando cinco o seis mil, tendría que justificar la diferencia por un impacto en la demanda agregada. Creo que no lo justificas”, subrayó.
El titular del CCE también refirió que está “demostrado” que hoy en día es más barato importar gasolina que producirla, por lo que señaló que “hay muchas cosas en dónde invertir” para crear infraestructura y obra pública “al mismo tiempo”.
Estas declaraciones se suman a las críticas realizadas esta tarde por el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) en el Senado, quienes consideraron que la compra de la refinería es un “sinsentido, pues ya genera pérdidas”.
Los legisladores cuestionaron la compra de una refinería que ya genera una caída considerable en sus ganancias, pues indicaron que Deer Park anotó pérdidas de mil 438 millones de dólares en 2019 y de 4 mil 56 millones de dólares en 2020.
Ayer lunes, Petróleos Mexicanos (Pemex) anunció que firmó un acuerdo para la compra de la refinería Deer Park a la petrolera Shell, compañía que tiene el 50.005% de las acciones.
Sin embargo, se debe esperar a la resolución de las autoridades regulatorias de Estados Unidos que apruebe la compra-venta de la transacción.
La operación fue por 596 millones de dólares, lo cual es un monto pagado en efectivo y un monto representado por la eliminación de la participación de Shell en la obligación de deuda de la sociedad.